MÚSICA, SONIDOS Y STOCKHAUSEN
Música, sonidos y Stockhausen
Todo nace de preguntarse qué es la música, y a partir de eso, dar definiciones de tipo científico, teórico-musical y subjetivo o sentimental; este último punto es donde incultos y cultos pueden definir qué es la música. Pero antes de todo, cabe aclarar que el argumento de este texto no se fundamenta en la definición que tiene Stockhausen de la música, pues él cree que "Desde que el hombre existe ha habido música. Pero también los animales, los átomos y las estrellas hacen música.", concepción que no comparto por ser tan poco específica, por dar una definición de música tan amplia que cualquier cosa sin orden ni sentido deberemos interpretarla como algo concreto, y cualquiera podría llamarse músico.
La música para mí es una serie de sonidos bien ordenados que transcurren en el tiempo y se repiten cada tanto, todo tan bien montado que genera sentimientos muy concretos en la persona que lo escucha; lo que no percibo en Stockhausen. En un comienzo lo único que genera es confusión, y ya se verá porqué.
La definición de música que di coincide con la música tradicional, las escalas a las que estamos acostumbrados, pero en el siglo XX llega la posibilidad de jugar con cualquier sonido al descomponerlo, estirarlo, acelerarlo y unirlo con otros sonidos; todo por medio de la electrónica, y nace la música electrónica y electroacústica. El tema de descomponer sonidos no es novedoso en la música tradicional si no se sale de las escalas ya definidas, una armonía es un conjunto de sonidos sonando simultáneamente que se pueden descomponer en sonidos individuales, mas esto no se había ampliado a otros sonidos con escalas más difusas, cuyo logro se lo debemos a la música electrónica y sus fundadores. Hay muchos personajes surgidos de Francia y Alemania, pero me quiero centrar en el alemán Karlheiz Stockhausen, un hombre muy extraño, obsesionado con los sonidos que el mundo le brindaba, influenciado por las creencias orientales y el libro de Urantia, con una espiritualidad tecnológica futurista cuya explicación quería dar por medio de la música electrónica, la cual veía como el siguiente paso hacia la percepción más profunda de la realidad. Y no, no me estoy volviendo loco al hablar de un tipo que parece, o quizás fue un poco, una farsa de arte, como los pintores que solo riegan colores en un lienzo sin sentido. Alego que no me estoy enloqueciendo porque veo a Stockhausen de una manera particular; no creo que sus obras fuesen música, para mí la música es estética, orden y repetición que llena el alma, pero Stockhausen no me genera eso, aunque sí me genera algo, y es donde creo que Stockhausen acierta y comienzan a cobrar sentido sus aseveraciones, sus teorías sobre el sonido. No creo que haga música, pero sí creo que las estructuras sonoras que arma y ajusta, como él dice, llevan a ver la trascendencia del sonido, ¿cómo? Bueno, algo que destaca en él es la ambientación, la percepción de nuestro espacio por medio del sonido, las ideas de cerca, lejos, arriba, abajo están en Stockhausen de maneras tan extrañas que juegan con la percepción de en qué espacio nos encontramos, juega con el sonido estéreo como lo hacen los videojuegos de rol actuales para brindarnos información de dónde está el enemigo por los ruidos que hace, pero él va más allá, con él no somos oidores pasivos, en muchos casos nos hace creer que nos movemos, que tropezamos o pasamos de una habitación a otra donde cada habitación tiene distintas leyes y maneras de bifurcar el sonido. También juega con el tiempo, con él podemos ralentizar el tiempo y escuchar un instante en un minuto, o acelerarlo y escuchar una hora en un segundo. En general, Stockhausen, con herramientas electrónicas logra hacernos escuchar espacios distintos, argumentos nuevos sobre cómo se percibe la realidad, juega con nuestra percepción del espacio para enseñarnos a adaptar nuestro oído a espacios o lugares donde las reglas las da él, como bebés, que poco a poco, comienzan a encontrar sentido a lo que sus sentidos les dicen. Por ejemplo, nosotros, sin poder ver, sabríamos interpretar que estamos adentro de un cubo de aluminio si una pelota de goma golpeara el techo del cubo, porque nuestro cerebro ya entiende cómo se dispersan las ondas por ese cubículo en el que nos encontramos, pero no es tan fácil si ahora es un cubo de cuatro dimensiones, donde la pelota golpea al techo del cubo más exterior, ¿cómo saberlo si nunca hemos estado dentro de un cubo de cuatro dimensiones? No estamos familiarizados con ese espacio. Creo que Stockhausen quiere enseñarnos a vivir auditivamente en espacios con reglas distintas, él estaba loco, quizás muchas de sus obras no son música, pero sí era un maestro al desentrañar los misterios y configuraciones de los sonidos para brindarnos experiencias nuevas en lugares nuevos con tiempos y reglas distintas...
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